Se aman y se odian.
Esperan la llegada de la Senõra y ensayan con devoción su asesinato. Una forma de escapismo que les permita pasar el tiempo y encontrar algún propósito en la espera. La desesperación y el humor se mezclan a medida que la situación se deteriora. La Senõra no llega. Alguien tendrá que morir.
En un universo de desconexión absurda, dos intérpretes intentan una ilusión imposible revestida, una y otra vez, de momentos de expectación, violencia y derrota. El humor como forma de subvertir el poder y escapar de la banalidad.
Un espectáculo sobre el optimismo y las ganas de cambio.